ROMA, 3 Mayo (EUROPA PRESS)
El tenista español Rafael Nadal consiguió su cuarta corona en Roma tras derrotar en la final del cuarto Masters 1000 de la temporada al serbio Novak Djokovic (7-6(2) y 6-2), en un partido muy igualado ofrecido por las dos mejores raquetas sobre tierra del circuito, pero en el que el número uno mundial sudó para recuperar su hegemonía en la Vía de los Gladiadores.
El mallorquín, que llegaba al determinante encuentro tras superar con facilidad las rondas anteriores, dio muestras de flaqueza física tras el esfuerzo acumulado en las dos últimas semanas, en las que participó en los torneos de Mónaco y Barcelona, y en los que al igual que en los Internacionales de Italia, también consumó la victoria.
Al igual que sucediera en el precedente anterior entre ambos contendientes en la final del Principado monegasco, en la que el manacorense se proclamó pentacampeón tras ganar 6-3, 2-6 y 6-1, el jugador serbio puso nuevamente contra las cuerdas al español, lo que le sitúa como su principal rival sobre esta superficie en los próximos certámenes.
El choque comenzó como más le gusta al balear, con un ruptura del servicio del rival, en un inicio muy cómodo para el balear. Con la manga avanzada con 5-3, Nadal no pudo cerrar el set al desaprovechar su segunda ventaja al resto, y permitió que el de Belgrado entrase en el partido y forzase la 'muerte súbita' tras consumarse tres 'breaks' consecutivos.
La pena máxima fue un cúmulo de tensiones entre ambos jugadores, pero fue finalmente el número uno mundial el que se llevó el desempate por 7-2, en gran medida por las imprecisiones en las dejadas de Djokovic, que pagó sus decisivos errores con su propia raqueta al romperla contra el suelo.
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